٢٦.٢.٠٧

Ciega


Era liso, tenia una textura muy suave y fina, mmmm… ¿que cosa podría ser eso? Ya sabia como era una cobija, una silla, una cama, hasta podía reconocer como era un espejo con una sola mano. Claro, no había sido nada fácil. Horas y horas de practica.

Había aprendido que no es lo mismo conocer una cosa con las dos manos, que con una, sabia que cada uno de sus dedos sentía de forma diferente… pensaba que sus dedos tenían su textura favorita, por ejemplo al dedo índice de la mano derecha, le encantaba sentir la mermelada, casi podía disfrutar de su dulzura…

El objeto que mantenía en sus manos era como… mmmm… ¿un hoja de papel?
– Sí sí… seguramente es una carta escrita sobre papel muy fino y elegante – penso Sophia. ¿Será para mi? Mmmm… ¡ya se!, le preguntare al señor Armario, el sabe mucho de todo, él sabe muchas cosas, sabe como tener muy bien acomodada la ropa, por tamaños y colores, por vestidos y abrigos… sí, le preguntare.

Se dirigió hacia el señor Armario casi a brincos…. Le urgía saber para quien era esa carta. – Señor Armario, Señor Armario, mire lo que encontré – Ay, ¿ahora que Sophi? – Pregunto el señor Armario con cierto tedio y cansancio, claro, no era nada fácil estar lleno de cosas y mantener la misma postura durante todo el tiempo.

– Nada, que encontré esta carta, y quiero saber si es para mi – Pero princesa – dijo el señor Armario – Tu no conoces a nadie que te pueda mandar un carta, hace ya mas de diez años que llegaste a la casa de la Señora Hostal y no conoces a nadie, tus únicos amigos somos la Alfombra, el Sillón, las Paredes y yo… y creeme, nosotros nunca te podríamos escribir una carta. Después de escuchar esto, comenzó a llorar, sentía como las lagrimas recorrían su joven rostro, la respiración entre cortada… La enfermera entro corriendo a la habitación de Sophia y le aplico un fuerte sedante.

Sí, Sophia padecía una extraña enfermedad de nacimiento. No podía ver y constantemente sufría ataques respiratorios. Días después de haber nacido, alguien la había dejado a las puertas del hospital infantil. Tenia diez años .

En el hospital, todos querían y cuidaban muchísimo a la niña, los médicos siempre estaban muy pendientes de su salud. El director del hospital, un señor de casi 60 años, era como el padre adoptivo de Sophia, Era muy alto, con la piel tan blanca y siempre oliendo a medicamento, esto le transmitía un fuerte sentimiento de seguridad y respeto a Sophi, ella lo llamaba tío, tío Ángel.

Desde la llegada de Sophia al hospital, el tío Ángel se mostró muy interesado en la niña. y su padecimiento. Sufría de una ceguera inexplicable pero todo en sus ojos era normal, además, por razones igual de extrañas, constantemente tenia ataques respiratorios. En ocasiones, eran tan graves que perdía el conocimiento.

Después de padecer uno de estos ataques, Sophi se despertaba muy feliz, platicaba de sus sueños. Hablaba de un mundo de colores muy bonito, de objetos que tenían vida y eran sus mejores amigos. A todo el mundo le gustaba escuchar sus sueños, pero en especial al tío Ángel, le encantaba ver como se emocionaba la niña al relatar sus historias, ver su inocencia, su alegría.

Debido a la delicada condición física y por indicación de los médicos, Sophi, debía de permanecer en una habitación sumamente higiénica, ya que cualquier corriente de aire, que transportara un poco de polen o algún bichito, podría provocar en la niña un fuerte ataque respiratorio.

Así que la niña había vivido diez años en una misma habitación. Cada una de los objetos que allí se encontraban, le eran muy familiares, cada uno tenia una historia, una importancia. Debido a su ceguera, la niña se entretenía tocando todas las cosas, sintiendo su textura, el material, adivinando que eran y de que estaban hechos.

En ocasiones, Ángel entraba a la habitación de Sophia, haciendo el menor ruido posible para no interrumpir la imaginación y los descubrimientos a la niña. Sophia les platicaba a sus juguetes, que un día su tío la curaría y entonces los podría ver de frente, con sus ojos sanados.

Al tío Ángel, esto le provocaba sentimientos encontrados, por un lado, era muy feliz viendo como la niña jugaba con tanta gracia, pero también, sentía una fuerte impotencia, y las cuestiones lo derrumbaban. ¿por qué no podía hacer algo por ella?, ¿por qué tenia que sufrir una niña tan tierna, tan linda? ¿por qué el destino y la vida misma la tenia que tratar de esa forma?

Era un tormento, Ángel la quería como si fuera su propia hija y lo que mas quería en el mundo, era sanar a su pequeña, sin embargo, sabia que era muy difícil, que la solución probablemente nunca la encontraría…

– ¡Mire señor Armario! – exclamo Sophia, con una de sus mas grandes sonrisas dibujada en su pequeño rostro – el señor sol, que bonito, cuanto calor… mmmm… es hermoso y el señor Aire, ahhhh… puedo respira como nunca… – Sophia estaba extasiada, por primera vez podía ver el sol, por primera vez, el viento acariciaba sus rostro y alborotaba sus rizos…– Señor Armario, señora alfombra, todos, vamos a jugar con el sol… por favor. Nadie se negó, el Señor Armario, con un lento movimiento empezó a moverse, la alfombra se peleaba con la cama… las paredes y los tapices también quería salir … eso era total caos de excitación y felicidad…

Al día siguiente, Sophia estaba acostada en su cama, con el vestido mas bonito, con sus zapatos muy limpios y lustrosos, en el rostro tenia dibujada una extraña sonrisa, como de alguien que ha llegado a tocar por un instante la felicidad…

Sophia estaba muerta, alguien había abierto la ventana, alguien le había dado la oportunidad de comenzar su vida, aun que fuera, en otro lugar, en otro espacio…

Ver sin vivir


Erase una vez, una pequeña que no tenía cabeza, sin embargo, siempre se arreglaba muy bonito, se peinaba muy bonito, cepillaba cada uno de sus rizos…

Lo que más le preocupaba eran sus ojos. Los sentía muy tristes, siempre húmedos. Las lágrimas quemaban sus mejillas… cuando una lágrima caía sobre su vestido, dejaba una manchita roja… era sangre…

Un día… mientras ayudaba a su abuelita le pregunto: oye abuelita porque mis ojos lloran sin cesar? Entre suspiros la abuela le contesto:

Hay hija!… Sabes donde esta tu cabecita? Esta en ese mundo triste y lleno de horror. Frente a su Mirada pasan los más horribles crímenes e injusticias… y es por eso que tu corazón sufre y tus ojitos lloran con lo que ven día tras día… el mundo de los hombres... la realidad.

١٧.٢.٠٧

la derrota del pensamiento


Para hoy y para nosotros, nada, solo unas letritas que encontré en uno de esos libros de futuro presente y muerte:


... y la vida guiada por el pensamiento cede suavemente su lugar al terrible y ridículo cara a cara del fanático y del zombie.



Alain Finkielkraut.

١٦.٢.٠٧

Das ende aller dinge

Presenta neo:
ya limpios y reconfortados se miran unos a otros...
todos tienen la verdad en la mirada, la sienten...

la razón los cubre con su cuerpo
no saben que hacer...
los inteligentes han regresado...
los fuertes lloran como niños grandes...
los heridos mueren, los sensibles guardan silencio...
lo saben,
desde el principio lo sabían
no estaban en una batalla,

estaban en ningún lugar.

el mundo.

١٤.٢.٠٧

Apocalipsis


San Juan Apóstol 9:4

Y se les mandó que no dañasen a la hierba de la tierra, ni a cosa verde alguna, ni a ningún árbol, sino solamente a los hombres que no tuviesen el sello de Dios en sus frentes.

El fin de la historia



"Un funcionario del Departamento de Estado del gobierno estadounidense, Francis Fukuyama, popularizó la idea del triunfo definitivo del liberalismo económico y político. Sostenía que, de ahora en más, las sociedades actuales y futuras no podrán, salvo manifestaciones limitadas y menores de disidencia, pensar ni actuar con otro modelo que no sea el del liberalismo.

Dice textualmente Fukuyama en su obra "El fin de la historia": "el triunfo de Occidente, o de la idea occidental, es evidente antes que nada en el total agotamiento de alternativas sistemáticas viables al liberalismo occidental.

(Este triunfo) puede verse en la extensión irresistible de la cultura occidental de consumo en contextos tan diversos como los mercados de campesinos y los aparatos de televisión en color ahora omnipresentes a través de China, los restaurantes cooperativos y tiendas de ropa abiertos en Moscú, el Beethoven entubado en las grandes tiendas japonesas, y la música de rock deleitando tanto en Praga, Rangún o Teherán.

Quizás estamos siendo testigos no sólo del fin de la Guerra Fría, o del pasaje de un período particular de la historia de posguerra, sino del fin de la historia como tal: esto es, el punto final de la historia ideológica de la humanidad y la universalización de la democracia liberal occidental como la forma final de gobierno humano (...) hay poderosas razones para creer que este ideal será el que gobierne el mundo material en el largo plazo."

www.elhistoriador.com.ar/frases/historiaymemoria/findelahistoria.php

¿Qué nostálgicas palabras podría pronunciar el ser Umberto Eco a cerca de esto, o mejor aun, que estructura podría definir aquel otro señor Bourdieu ?

Realidad

... y mejor aun, entre mas abstracta sea la forma... más concreta será su idea...

Preterito imperfecto


En concreto, el tiempo, la historia, los conflictos, las guerras, las revoluciones, las constituciones, los derechos humanos, las vanguardias artísticas, los progresos tecnológicos y científicos y las eras históricas, tienen como factor constante el absurdo.

La historia comprueba la realidad, y bajo los parámetros de este juicio, la historia del ser humano ha sido una serie de fracasos constantes y numerables, y por lo tanto, el ser humano, junto con su historia, sus ideas, sus realidades... cubre sus ojos con la venda ingenua del progreso llamada modernidad, dando uno o dos pasos hacia el patíbulo de la existencia.

Mientras tanto


Mientras los bites siguen acumulando tetrabites, mientras los mass media siguen ofertando hiperealidades, mientras el marco de realidad se adorna con pobreza social, pobreza visual, pobreza intelectual, pobreza identitaria… es decir, pobreza existencial. Mientras el poder económico adquiere el adjetivo de único, mientras los valores culturales siguen con su vertiginosa mixtura y desvanecimiento… mientras la epidemia de formalismos ortodoxos y arcaicos se contraponen al sin salida, mientras las reglas se deconstruyen en pro de un sin sentido… mientras…

Mientras tanto, surge la presente propuesta. Girando de forma paralela a su razón de ser: la contextualidad. Consciente de carga histórica, de carga social. Partiendo de la generalidad y compresión de los múltiples y distintos bordes tendenciosos de la información, de las tendencias, escuelas y propuestas.

Es decir, este proyecto y sus propuestas, pretenden siempre fluir entorno a al contexto entendido, estudiado. Basándose en teorías sociales, políticas, económicas, filosóficas, históricas, informáticas, tecnológicas, que convergen en un eje principal... el ser humano.

México